¡Hola a todos!
Lo prometido es deuda, y como cada semana, aquí tenéis una nueva entrada.
Se acerca la ansiada fecha del comienzo de mis prácticas en la televisión local de Orense y con ella, unos inexplicables nervios que no me dejan descansar por las noches y durante el día se encargan de corroerme a más no poder.
Por si eso no fuera poco, mi tutor del trabajo de fin de carrera se encarga de meterme una horrible presión a la cual no estoy, ni mucho menos, acostumbrada. Sé que con el tema de las dichosas prácticas lo he tenido bastante abandonado, pero debería ser consciente de que no soy una "súpermujer" que es capaz de preocuparse tan a fondo por ambos temas. Espero que entre en razón y me dé un respiro durante este mes tan ajetreado que se me plantea.
En cuanto al terreno amoroso, sigo estancada en la indecisión. Cuando ya creía haber cerrado cierto capítulo de mi vida (lo que tiene que ver con L.) empiezo a creer que esto no es ni mucho menos así, y que cada vez que lo vea, algo se revolverá en mis adentros. Sigo diciendo que soy consciente de lo crudo de la situación y que tengo cosas más importantes en mi vida en las que pensar sin ser esto, pero ya se sabe: en mi cabeza no mando ni yo misma. Me pregunto una y otra vez hasta cuando va a durar este tira y afloja entre él y yo, lo que hace que mis L. se inmiscuya en mis pensamientos más de lo que yo quisiera. ¿Qué le costaría dejar de comerme con la mirada y zanjar de una buena vez lo que me lleva preocupando casi dos años? En mi humilde opinión, nada, pero se ve que el chico no está por la labor de pasar página y dejármela pasar a mí.
Esto es todo por ahora. Os seguiré informando en cuanto vaya encontrando huecos libres.
¡Saludos!